miércoles, 27 de junio de 2012

Árbol

¿Qué tienen los árboles? Me pregunto yo, que se enraízan a la tierra y extienden sus plegarias al cielo.
Se enraízan como ese amasijo de células que se anidan en el útero, ávidas de vida, deseosas de respirar

¿Qué piden los árboles? ¿Pedirán por nosotros? No lo creo.
¿Qué me quieren decir los árboles? ¿Quizás enseñarme esas otras realidades?
Hay un mundo, un mundo desconocido. Ese del cual un ciego nos puede contar en detalle. El mundo cuando el imperio de la vista ha sido derribado.
Ese mundo configurado por espacios, el espacio del silencio, el instante en que las yemas de nuestros dedos se tocan, el suspiro que se pierde, el espacio de las ausencias.
No lo conozco, pero me he aproximado.

Y dejo de tener límites
Y dejo de tener límites
Y dejo de tener límites

 Lo único claro que tengo es que esa noche escuché mis propios pasos. Y por cada paso que daba, el silencio se impregnaba en mi piel.
¿Han escuchado sus propios pasos?
 Deberían…

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